El
Consejo de Estado tumba la reforma registral que impulsa el hermano de Rajoy
Noticia publicada en Vozpópuli
El órgano consultivo pone diversas objeciones esenciales a la
regulación del sistema informático registral orquestada por Enrique Rajoy.
Sostiene que no se puede emplear un reglamento para colar por la puerta de
atrás una reforma del funcionamiento de todos los Registros. El asunto reviste
ribetes de escándalo y corre el riesgo de estallar en las manos del recién
llegado titular de Justicia.
El Consejo de Estado ha enmendado de arriba abajo el
reglamento que desarrolla elsistema registral
electrónico ideado
por un grupo de registradores encabezado porEnrique Rajoy, hermano del presidente del Gobierno.
De acuerdo con un dictamen del órgano consultivo al que ha
tenido acceso Vozpópuli, el Ejecutivo no puede
aprovechar un mero reglamento para colar por la puerta de atrás una reforma de la figura
de los registradores, una institución amparada por la
Constitución española. Aunque el informe no sea vinculante, la dimensión de las
objeciones pone en cuestión toda la reforma iniciada del Registro Civil. El
asunto reviste ribetes de escándalo y corre el riesgo de estallar en las manos
del recién llegado titular de Justicia, Rafael Catalá.
A principios de julio, el Gabinete de Mariano Rajoy introdujo en
el Real Decreto-ley 8/2014 la creación de una corporación pública
que gestionase el sistema informático del Registro Civil. A continuación, esta
iniciativa precisaba una arquitectura legal que la sustentase e implementase
mediante un reglamento. Y éste se formuló a través de un
proyecto de Real Decreto fechado el 15 de septiembre de 2014,
sobre el cual ha emitido un dictamen el Consejo de Estado.
¿Y qué dice el órgano consultivo en ese documento? Pues pone
numerosas objeciones esenciales al decreto y, por lo tanto, censura todo el andamiaje
legal que presta cobertura a una reforma que ha incendiado a buena parte del Colegio
de Registradores.
Básicamente, el nuevo decreto sólo tenía que articular un
reglamento y crear una corporación que se encargase de gestionar el sistema
informático del Registro Civil. Ése era el mandato del Real Decreto-ley 8/2014.
Sin embargo, por la puerta de atrás y mediante este reglamento de rango menor
se amplían las capacidades de la nueva Corporación , hasta el punto de asumir la
gestión integral de todo el sistema informático registral y exigir a los
registradores que traspasen a la Corporación sus bases de datos, aplicaciones y
sistemas automatizados. O lo que es lo mismo, obliga a los registradores a renunciar al control de
los servicios electrónicos de todos los Registros y, por consiguiente, choca
directamente con sus competencias.
El Consejo de Estado entiende que no existe un mandato legal
para extender el sistema informático a otros Registros y que la Corporación
debe limitarse a ser un mero órgano de gestión del sistema informático del
Registro Civil. “El proyecto no puede entrar a regular aquellos aspectos y
funciones que nuestro ordenamiento jurídico reserva al Colegio de
Registradores”, sostiene.
Es más, el órgano consultivo del Estado recomienda una solución
mucho más simple: que el Colegio de Registradores asuma la gestión íntegra de
la Corporación.
Lee la noticia completa en: