Se consideran personas
especialmente sensibles aquellas que sufran patología que pudieran verse
agravadas por el COVID-19, en base a las recomendaciones dadas por el
Ministerio de Sanidad, tal como se establece en el procedimiento de actuación frente
a casos de infección por el nuevo coronavirus (SARS-COV-2) editado por el
citado Ministerio de Sanidad, que indica como factores de riesgo y enfermedades
de base las siguientes:
- Diabetes.
- Enfermedad cardiovascular,
incluida hipertensión.
- Enfermedad hepática crónicas.
- Enfermedad pulmonar crónicas.
- Enfermedad renal crónicas.
- Enfermedad neurológica o
neuromuscular crónicas.
- Inmunodeficiencia (incluyendo
VIH).
- Cáncer.
A estas enfermedades hay que
añadir la situación de mujeres embarazadas o en periodo de lactancia y los
mayores de 60 años.